top of page

Serie confesiones: «Confieso que soy tacaña por temor a perder lo que tengo»


«Confieso que muchas veces soy tacaña por temor a perder lo que tengo, ya sea que suceda ahora o en el futuro»


Hace poco descubrí este pecado en mí y fue realmente doloroso y pesado reconocerlo. Me golpeó en lo más profundo de mi alma porque me permitió ver la manera en que mi corazón actuaba con respecto a lo que tengo y lo que puedo llegar a perder. Incluso pude ver la falta de compasión y amor hacia otros ya que, al no poder dejar en el Señor aquello que tanto amaba y me preocupaba, estaba olvidándome de ser instrumento de cuidado y bondad para quienes me rodean.


No estaba confiando en Dios.

No estaba pudiendo confiar en Su providencia diaria y eterna.

No estaba entendiendo que yo solo soy una simple administradora de todo lo que Él me da. No soy dueña de lo que tengo, por lo tanto, no puedo aferrarme a nada de lo que hay en esta tierra sino que tengo que dar a otros de lo que recibo de Su mano.


Aún sigo cometiendo ese pecado. Pero estoy intentando confiar y recordar que todo lo que tengo es por gracia, dando pasos certeros que me permitan actuar en fe, sabiendo que Sus planes son perfectos para mí, por lo que, por más que yo guarde para mi propio reino, el que está al control de todo es el Señor. Él será quien dé y quien quite. No soy yo quien cuida de mi futuro.


Parte del Sermón del Monte desafía mi vida cada día y me confronta con recordar que Él sabe cuáles son mis necesidades y provee para cada una de ellas. Con lo cual no debo afanarme sino recordar que necesito buscar Su reino y descansar en Él (Mt 6:26-33), en Su infinita misericordia.


Deseo que, si también has descubierto ese pecado en tu vida, puedas correr al Señor con manos abiertas. Deja en Sus manos todo aquello que te ha dado para poder dar a otros con corazón alegre y dadivoso, no mirando para tu propio reino sino dando generosamente para que el reino de Dios siga extendiéndose y las Buenas Noticias del Evangelio sigan siendo conocidas por todas las naciones. Confía y descansa en el Señor, quien puede transformar nuestro corazón y enseñarnos a no afanarnos sino a confiar en Su provisión.


Diseño: Gabriela Rodríguez

 
 
 

Comments


  • Facebook
  • White Instagram Icon
© 2024 Ella Florece Internacional
bottom of page